VOCES APENAS ESCUCHADAS, JAMÁS CREIDAS
Isabel G. Gamero Cabrera
Piedra Papel Libros, Jaén (2025)
Por Ángel E. Lejarriaga
Isabel G. Gamero nació en Ronda, y en su momento se trasladó a Madrid en donde actualmente imparte clases en la Universidad Complutense. Es licenciada en periodismo y filosofía. Tiene a su haber publicados numerosos artículos académicos, también en prensa, relatos y un libro: La paradoja de Habermas (2021).
Voces apenas escuchadas, jamás creídas recupera cartas escritas por mujeres que fueron recluidas sin consentimiento en el Asilo de Dementes de Leganés entre 1852 y 1984. Muchas de estas cartas nunca llegaron a su destino, bien fueron censuradas por las religiosas que administraban el centro, bien fueron guardadas por no considerarse creíble su contenido.
La autora examina estos testimonios utilizando herramientas de filosofía de la psiquiatría y el concepto de «injusticia epistémica» desarrollado por Miranda Fricker. Se contraponen explicaciones naturalistas y constructivistas sobre la salud mental, con especial énfasis en cómo los prejuicios de género influyeron en los internamientos, en los diagnósticos y en el tratamiento de las mujeres recluidas.
Isabel Gamero no sólo analiza las cartas desde una perspectiva teórica, sino que da voz a quienes fueron silenciadas. Reivindica la credibilidad y dignidad de estas mujeres, y saca a la luz las violencias que sufrieron. El libro concluye con una reflexión sobre si las injusticias epistémicas ―especialmente las dirigidas contra mujeres encerradas en psiquiátricos― siguen existiendo en la actualidad.
Este libro es un importante aporte histórico y filosófico desde la rigurosa y compasiva mirada de la autora, fusiona memorias personales con teorías filosóficas específicas, para ofrecer una reflexión desde el feminismo y la psiquiatría crítica. Además, al rescatar estas cartas, el libro cumple una misión ética de justicia, otorga voz a quienes fueron despojadas de ella. Esta recuperación del testimonio es un acto político y reparador.
Si hacemos una comparativa con autoras que han estudiado el tema del internamiento psiquiátrico, encontramos testimonios del mismo que son la base del libro de Gamero. Por ejemplo, Michel Foucault y su Historia de la locura en la época clásica (1961). Foucault afirma que el nacimiento de la psiquiatría está ligado al control social; su análisis es filosófico e histórico. Ambos textos coinciden en visibilizar la dimensión política del internamiento, pero Gamero nos aproxima al sufrimiento de las víctimas. Se puede citar también a Edward Shorter y su libro A History of Psychiatry (1997), centrado en los aspectos técnicos de la hospitalización; a Gamero sólo le interesan las víctimas, con un enfoque de género. Hay más autoras relevantes que han tratado el tema como Charlotte Perkins Gilman que escribe en 1892, The Yellow Wallpaper, una obra de ficción que refleja cómo el encierro y el diagnóstico psiquiátrico se usaban como control patriarcal sobre las mujeres. En este caso hay un paralelismo entre la ficción de Gilman y los hechos que describe Gamero: ambas obras denuncian la psiquiatrización de la disidencia femenina. También podríamos mencionar a Kate Millett, The Loony-Bin Trip (1990), que cuenta su propia experiencia, constatando la poca credibilidad otorgada a la palabra femenina. Y finalmente hay que citar a Miranda Fricker, Epistemic Injustice (2007). El concepto que utiliza Gamero en su libro proviene de esta autora: la injusticia epistémica, es decir, la desautorización sistemática de ciertos sujetos como portadores de conocimiento. Fricker lo plantea de un modo abstracto y teórico, Isabel Gamero lo encarna en casos reales, mostrando cómo las cartas de mujeres internadas eran censuradas, ignoradas o ridiculizadas.
En síntesis, Voces apenas escuchadas, jamás creídas es un libro que visibiliza a mujeres víctimas de la psiquiatría, mujeres que por el simple hecho de serlo fueron condenadas al silencio más abyecto. Además, quiero destacar que este texto tiene la virtud de invitar a leer más sobre el tema.
Voces apenas escuchadas, jamás creídas recupera cartas escritas por mujeres que fueron recluidas sin consentimiento en el Asilo de Dementes de Leganés entre 1852 y 1984. Muchas de estas cartas nunca llegaron a su destino, bien fueron censuradas por las religiosas que administraban el centro, bien fueron guardadas por no considerarse creíble su contenido.
La autora examina estos testimonios utilizando herramientas de filosofía de la psiquiatría y el concepto de «injusticia epistémica» desarrollado por Miranda Fricker. Se contraponen explicaciones naturalistas y constructivistas sobre la salud mental, con especial énfasis en cómo los prejuicios de género influyeron en los internamientos, en los diagnósticos y en el tratamiento de las mujeres recluidas.
Isabel Gamero no sólo analiza las cartas desde una perspectiva teórica, sino que da voz a quienes fueron silenciadas. Reivindica la credibilidad y dignidad de estas mujeres, y saca a la luz las violencias que sufrieron. El libro concluye con una reflexión sobre si las injusticias epistémicas ―especialmente las dirigidas contra mujeres encerradas en psiquiátricos― siguen existiendo en la actualidad.
Este libro es un importante aporte histórico y filosófico desde la rigurosa y compasiva mirada de la autora, fusiona memorias personales con teorías filosóficas específicas, para ofrecer una reflexión desde el feminismo y la psiquiatría crítica. Además, al rescatar estas cartas, el libro cumple una misión ética de justicia, otorga voz a quienes fueron despojadas de ella. Esta recuperación del testimonio es un acto político y reparador.
Si hacemos una comparativa con autoras que han estudiado el tema del internamiento psiquiátrico, encontramos testimonios del mismo que son la base del libro de Gamero. Por ejemplo, Michel Foucault y su Historia de la locura en la época clásica (1961). Foucault afirma que el nacimiento de la psiquiatría está ligado al control social; su análisis es filosófico e histórico. Ambos textos coinciden en visibilizar la dimensión política del internamiento, pero Gamero nos aproxima al sufrimiento de las víctimas. Se puede citar también a Edward Shorter y su libro A History of Psychiatry (1997), centrado en los aspectos técnicos de la hospitalización; a Gamero sólo le interesan las víctimas, con un enfoque de género. Hay más autoras relevantes que han tratado el tema como Charlotte Perkins Gilman que escribe en 1892, The Yellow Wallpaper, una obra de ficción que refleja cómo el encierro y el diagnóstico psiquiátrico se usaban como control patriarcal sobre las mujeres. En este caso hay un paralelismo entre la ficción de Gilman y los hechos que describe Gamero: ambas obras denuncian la psiquiatrización de la disidencia femenina. También podríamos mencionar a Kate Millett, The Loony-Bin Trip (1990), que cuenta su propia experiencia, constatando la poca credibilidad otorgada a la palabra femenina. Y finalmente hay que citar a Miranda Fricker, Epistemic Injustice (2007). El concepto que utiliza Gamero en su libro proviene de esta autora: la injusticia epistémica, es decir, la desautorización sistemática de ciertos sujetos como portadores de conocimiento. Fricker lo plantea de un modo abstracto y teórico, Isabel Gamero lo encarna en casos reales, mostrando cómo las cartas de mujeres internadas eran censuradas, ignoradas o ridiculizadas.
En síntesis, Voces apenas escuchadas, jamás creídas es un libro que visibiliza a mujeres víctimas de la psiquiatría, mujeres que por el simple hecho de serlo fueron condenadas al silencio más abyecto. Además, quiero destacar que este texto tiene la virtud de invitar a leer más sobre el tema.