18 may 2022

Bilbao-New York-Bilbao (Kirmen Uribe, 2011)

Kirmen Uribe es originario de Ondarroa, Vizcaya (1970). Ha estudiado Filología vasca y, después, cursado estudios de posgrado de Literatura comparada en Trento. Ha realizado diversos proyectos multimedia en los que se entremezclan la literatura, las imágenes y el sonido. Aparte de esta actividad, escribe en diversas publicaciones como en la prestigiosa revista The New Yorker, y ha traducido hasta ahora a Raymond Carver, Silvia Plath y Anne Sexton, entre otras.

El año 2001fue muy importante para él pues se publicó su libro de poemas Bitartean heldu eskutik, (“Mientras tanto cógeme la mano”). Fue traducido al castellano, al francés, al inglés y al ruso. Además, en 2007, recibió el Premio Nacional de la Crítica y nominado finalista en EEUU por el Pen American Center al mejor libro de poesía traducido al inglés.

Bilbao-New York-Bilbao (2011) es un libro, el primero para él en prosa, integrado en la cultura vasca, es su leitmotiv, el centro narrativo que se expresa a través de un conjunto de manifestaciones literarias alrededor de elementos vascos: artísticos, geográficos, idiosincráticos, históricos. La poesía, el ensayo, la narración corta y el diario, se entremezclan para dar forma a la obra.

Kirmen indaga en la vida de Liborio Uribe, que antes de morir quiso ver un cuadro del pintor vasco Aurelio Arteta. Tanto Liborio como su hijo José son personajes muy reales, dedicados por entero a la mar, en la que desarrollaron sus vidas, y en la que disfrutaron y sufrieron experiencias únicas, insólitas, crueles y felices.

Cuando Kirmen se encuentra con el cuadro de Arteta, y revisa las vidas de los protagonistas de la historia, entra en un mundo desconocido, que es pasado y es presente. Para realizar ese viaje utiliza elementos de comunicación actuales: cartas, diarios, correos electrónicos y cualquier otra fuente de información con la que construir el puzle narrativo.


Ese mundo que vislumbra, en su escrupulosa búsqueda, ha cambiado, como no podría ser de otro modo, pero Kirmen lo recupera, lo dota de vigencia y lo incorpora a un hoy abierto a aquello que permanece oculto, olvidado, un pasado cultural y experimental rico; quiere que salga a la luz y se sume al patrimonio histórico de las nuevas generaciones de su tierra.